El instante

Hacía tres semanas desde que había cambiado de casa, dos meses desde que había dejado el trabajo y tres años desde que había dejado a su mujer.

Cuando se levantó por la mañana, abrió la ventana de su habitación y sacó la cabeza para respirar el aire fresco de la calle. Miró a un lado y a otro y solo vio al barrendero, recogiendo sin prisas los montoncitos de basura que había ido formando. Por la esquina de la derecha apareció una mujer joven que miró hacia su ventana al ver la luz. Por un momento, los dos se miraron, y al momento siguiente, los dos desviaron la mirada como sin querer.

Ninguno de ellos podía saber entonces que un futuro en común acababa de prenderse en ese instante. Ninguno de ellos recordaría ese momento como el primer momento de los dos. Y, sin embargo, ya había sucedido.

Después

Él murió una tarde gris de un triste día de otoño. Cuando dejaron de llorar, sus amigos fueron dando cuenta de sus cosas, unas porque no tenía sentido conservarlas, y otras, porque a él le hubiera gustado que se las quedaran ellos.

Y luego quedó la memoria de los que lo conocieron, para seguir viviendo en ella. Y la cuenta de Facebook. Su cuenta de Facebook quedó vagando en la red. Los primeros años, su muro recibió algunas felicitaciones de cumpleaños, de amigos que le creían perezoso pero no muerto, de amigos etéreos que nunca supieron de su olor, o de sus gestos, o de su voz quebrada. Y luego, ya nada, solo vagar, por los siglos de los siglos, como un alma en pena.

Paula sabe.

A Paula le encanta quedarse a estudiar en casa de Inés porque su madre les prepara unas meriendas que parecen salidas de los programas de cocina de la televisión. También le gusta mucho salir a patinar con sus amigas, pero lo que más le gusta, por encima de todo eso, es salir con su padre a comerse una hamburguesa o salir de compras con él. Inés no lo entiende. Dice que el suyo tiene un gusto horroroso para vestirse y que sólo le faltaba salir con él para comprarse la ropa; que menos mal que siempre va con su madre, aunque, al final, Inés siempre acaba mosqueada porque no se ponen de acuerdo en sus gustos.

A Paula todo esto le suena un poco extraño, le cuesta imaginar qué haría su madre en un caso así. Cuando echa la vista atrás se ve, con cinco o seis años, en los columpios del parque, y a papá vigilando para que no le pase nada; ve a papá leyéndole un cuento antes de dormirse, y a papá cogiéndole la mano y la mochila para llevarla al colegio… Algunos días también recuerda a mamá, como si se moviera en medio de la niebla, y esos días se va a la cama pensando que quiere soñar con ella, porque, en sueños, Paula ve a mamá con claridad. La primera vez que soñó con su madre, muy al principio, Paula se despertó llamándola y se echó a llorar cuando vio que no estaba. Papá corrió a su cuarto, la abrazó muy fuerte y lloró con ella hasta que los dos se quedaron secos de lágrimas. Después se fueron al sofá, ella muy pegada a él y él abrazándola por los hombros, y  estuvieron viendo fotografías de las últimas vacaciones que pasaron juntos.

Inés ha llegado esta tarde llorando porque Lola, su perra, ha muerto. Era la primera vez que estaba preñada y el veterinario ya les había dicho que tendría un parto difícil. Al final había tenido que hacerle una cesárea y Lola no había podido resistirlo. Lola traía cuatro cachorros pero tres habían nacido ya muertos.

Inés llora desconsolada y Paula intenta calmarla pasándole la mano por el cabello y susurrándole al oído hasta que siente que a ella también se le ahogan las palabras en llanto. Entonces la abraza y siguen juntas hasta que los sollozos de Inés se agotan.

-Escucha, Inés; yo quiero ese cachorro. Yo puedo cuidarlo, yo puedo quererlo. Saldrá adelante, ya lo verás.

Inés no sabe qué decir y se sorbe los mocos.  Paula insiste y le coge las manos para que solo atienda a lo que ella le dice:

-Inés, Inés, mi padre no va a decir nada. Mi padre va a estar de acuerdo. Yo sé cómo cuidarlo. Yo sé cómo querer a un cachorrito sin madre…

Inés asiente en silencio y las dos van hasta su casa cogidas de la mano.