Problema de conciencia

Su conciencia no podía soportarlo; a pesar de la disciplina de partido, a pesar del compromiso personal con su íntimo amigo, el Presidente, no podía sentirse responsable de tanto atropello,  de tanta miseria, de tanto dolor,  y rechazó la cartera que le ofrecía. Y le pidió a su amigo que, por decoro, él también se marchara.